El proyecto pretende cuidar de los profesionales y acabar con la monotonía y soledad del profesional autónomo, creando un centro que no sólo es para los pacientes si no también para el crecimiento profesional y personal del coworker. Un lugar para compartir experiencia, conocimientos y vida.
La pieza clave es el deseo de formar un ambiente que facilite el desarrollo para profesionales de la salud mental a través del equipo, apoyo mutuo, análisis de casos, supervisión y formación. Todo esto basado fundamentalmente en el acompañamiento interprofesional y la dinámica de trabajo en equipo.
Esta idea nace después de muchos años de experiencia en el ámbito clínico y autónomo. Creemos que a partir de un espacio colaborativo donde se fomenta la interacción de los coworkers, se puede fomentar el trabajo mutuo, el aprendizaje común y las oportunidades de trabajo.